Cómo hacer buenas fichas de productos
No sé si seré capaz de transmitirte, a tí que me padeces, la importancia suprema que tiene realizar excelentes fichas de producto para todos y cada uno de tus productos en tu tienda online, no hay palabras suficientes como para expresar tanta necesidad. Déjame intentarlo ;)
En el ecommerce, si la portada de tu web es el equivalente al escaparate de las viejas tiendas analógicas, la ficha de producto es el contacto con el vendedor, cuando tú como cliente estás solicitándole más información. Bueno, en realidad lo que estás haciendo es pidiéndole que te dore la pastilla, que te suba el ego y que te convenza de que, siendo el cliente-rey, tienes que comprar ese producto. ¿Sabes como hacerlo?
Tiempo de vender!
Cuando un cliente ha pasado desde el listado de portada o desde el link de un buscador a tu ficha de producto... estás en el momento de la verdad. Bueno, el primer momento de la verdad, de los dos momentos habitualmente considerados estándar (mas el ZMOT, o momento cero, una idea de Google para vender mejor sus productos, y de la que hablaré en otro post)
Los elementos básicos de la ficha de producto son tres: un buen texto, una buena foto y un buen precio. Sin esto no hay nada que hacer.
Claro que las tiendas online modernas disponen de más elementos para mostrar o acompañar, y casi todos ellos pueden mejorar la venta, pero esos tres que te comento son el sine qua non de toda ficha de producto.
Los textos, vendedores y sugerentes
El texto de una ficha no debería ser escrito a la ligera. Debe ser persuasivo, debe ser fácil de leer, debe contener al menos una propuesta de beneficio para el cliente y debería llevar a la acción. Aunque en publicidad es común decir que las necesidades no se crean, lo que sí es cierto es que hay que encontrar, para cada uno de los productos, el argumento imbatible que hará que el cliente añada al carrito ese producto que está viendo.
No temas escribir textos largos, no pasa nada por hacer scroll. Pero asegúrate de que sean fáciles de leer separando en párrafos, haciendo frases cortas (o no muy largas). Redáctalos de forma que sean creíbles para tus clientes, en el mismo lenguaje que ellos usarían. Mientras redactas, inserta frases o palabras que sirven como términos de búsqueda, lo que tú mismo teclearías en Google si quisieras descubrir ese producto (cuanto más concreta sea la frase, más posibilidades hay de salir bien posicionados en Google, pero saldremos en menos búsquedas).
Inserta anécdotas, formas de uso, opiniones.... y todo lo que podría dar más argumentos al comprador para vencer su miedo a equivocarse; haz que todo lo que haya en ese texto vaya en la dirección de afianzar su sensación de que es la compra adecuada, en el momento adecuado, al precio adecuado.
Importante: redacta pensando primero en ellos y luego en Google; ellos son los que pagan tus facturas y si eres útil para tus clientes, el algoritmo de Google te premiará tarde o temprano.
Provoca appetitte appeal con las imágenes
Es cierto que en muchos casos recomiendo obtener las fotos directamente del fabricante, cuando es posible, para hacer que los costes de implementación de un ecommerce sean contenidos (las sesiones fotográficas no son gratis!) pero también es cierto que, una vez en marcha, siempre es mucho mejor hacer tus propias fotografías, que serán únicas, que tener las mismas fotos de los mismos productos de las mismas otras tiendas online de la competencia.
¿Porqué tus fotos? Porque si están bien hechas, llamarán más la atención que las fotos de catálogo del resto. Y porque además, podrás hacer varias fotos del mismo producto, mostrándolo en diferentes ángulos. Esto es vital, por la simple razón de que el usuario no está fisicamente tocando el artículo, así que si no lo conoce o no puede tenerlo en la mano (¿showrooming?) lo ideal es que se lo muestres tú. Y hazlo de la misma forma que te gustaría verlo a tí: un par de fotos generales y varias otras de detalle, de los puntos en los que ese producto destaca, de lo que lo hace diferente o simplemente de lo que los clientes buscan. Y cuando le pongas nombre a la foto, asegúrate de darle un nombre descriptivo del tipo bicicleta-btt-cuadro-20-aluminio-shimano-frenos-disco.jpg aunque sea un poco largo; Google lo agradecerá, y mostrará esa foto cuando alguien pida esas palabras en su buscador, de forma que aparecerás en más y mejores búsquedas (a cda foto, Google asocia un link a tu tienda online).
Busca un buen lugar para ellas, con abundante luz natural o móntate un estudio de fotografía razonablemente eficaz. Actualmente, hay opciones realmente interesantes para pequeños objetos que no son más que cajas construidas para servir de pequeño set fotográfico para objetos como calzado, botellas, jarrones, joyería, bolsos.... y que estando controlados por ordenador, permiten fotografías excepcionalmente buenas sin grandes conocimientos técnicos (échale un ojo a estos modelos). También hay sets de iluminación y fotografía a muy buenos precios, tanto para productos pequeños como grandes.

Y haz primeros planos, con fotos grandes (800x600 es un buen tamaño, un compromiso entre foto grande y no muy pesada) y detalles que se muestren perfectamente, que den ganas de tocarlo, de tenerlo, de poseerlo (appetitte appeal!). Que se te haga la boca agua nada más verlas ;)
¿Y un video? Pues también. De hecho, mucho mejor. Los vídeos llaman mucho la atención y si son cortos y con algo de gracia, apoyan la venta permitiendo elevar la conversión. Pueden convertirse en virales, muestran formas de uso, dan ideas y son fáciles de consumir.
El precio justo
Ah, el tercer elemento básico de la ficha es el precio. El más importante... casi siempre. No voy a hablar de cual debe ser el precio para cada producto, porque eso ya es cosa tuya, de tu estrategia de marketing o de tus costes, pero sí te daré un consejo: los precios siempre visibles y con el iva (si vas a consumidor final). Sin trampas, sin dobleces, sin pero con...
No hay nada que enfade más a un cliente que no ver los precios del producto que desea, o ese fatídico botoncito de "pregúntenos". Si estás en comercio electrónico ¿porque molestar al comprador obligándole a preguntar cada precio, uno a uno de todos los productos que quiere? Olvídalo, simplemente cerrarán tu web y se irán a otra.
Y los precios, que sean claros, por favor. Nada de suplementos ocultos, de añadidos de última hora, de tasas inexplicables: un producto, un precio. Es la única forma de que tu cliente confie en ti no solo para esta compra, sino para las siguientes (las más rentables).
Atribuciones: La imagen de cabecera es propiedad de Prestashop (es la ficha de producto de la template estándar) y la de la Hamburguesa está linkada desde Epicurious Recetas